Gastos e impuestos a pagar al comprar una casa: ¿cómo calcularlos?

La compraventa de una vivienda es un proceso que implica tomar muchas decisiones, tramitar documentación administrativa y pagar distintos gastos e impuestos relacionados con la operación.

Y es que, al adquirir una propiedad, no pagas únicamente el precio de venta, también abonas una serie de gastos extra que suponen un desembolso de entre un 10% y un 12% adicional al valor del inmueble.

¿Cómo se calculan los gastos de una compraventa de vivienda? Desde iad España, revelamos qué gastos e impuestos se pagan al comprar una casa y cómo puedes averiguar su coste. ¡Atento!

Probablemente, la compra de una vivienda sea uno de los pasos más importantes que damos en la vida, por lo que será crucial entender cuáles son los gastos administrativos e impuestos que generan este tipo de operaciones y qué factores influyen en su coste para determinar la viabilidad de la operación.

En todas las compraventas de viviendas se abonan los gastos de notaría, ya que la compraventa de una propiedad es una operación que debe escriturarse ante notario. Este profesional cobra unos aranceles que están regulados por el Estado, oscilando entre el 0,2% y el 0,5% sobre el valor de la propiedad.

Es decir, si adquieres un inmueble por un valor de 200.000 euros, abonarías un total de entre 400 y 1.000 euros en concepto de gastos de notaría, en función del profesional que escojas para tramitar la operación de compraventa.

Por otro lado, también deberás abonar el precio de la copia de la escritura, cuyo coste variará en función del número de hojas del documento.

En segundo lugar, otro gasto que va a cargo del comprador es el de gestoría. Al contratar los servicios de una gestoría para tramitar el pago de impuestos y los documentos relacionados con la compraventa, deberás pagar sus honorarios.

En este caso, al tratarse de profesionales que operan en el libre mercado, no disponen de precios regulados o fijos, si no que en función de sus tarifas y los servicios que contrates, abonarás un coste u otro. Por lo general, este coste suele rondar los 300 euros.

Al comprar tu nueva vivienda, las escrituras deberán inscribirse en el Registro de la Propiedad. Se trata de un organismo oficial cuyo objetivo es garantizar la seguridad jurídica a las operaciones de compraventa de vivienda que se llevan a cabo en el mercado inmobiliario.

Tras acudir a la notaría para firmar la escritura de compraventa y liquidar los impuestos correspondientes, se deberá presentar la documentación en la Oficina Registral de la región en la que se encuentra la vivienda, un trámite que irá a cargo del comprador y que está ligado a una tarifa regulada (Real Decreto 1427/1989). Su coste varía en función del precio de venta y suele variar entre su valor mínimo (24,04 euros) y su valor máximo (2.181,61 euros).

Ya hemos detallado cuáles son los gastos más habituales en una compraventa de vivienda. Ahora es el turno de los impuestos. ¿Cuántos se pagan y a qué valor ascienden? 

Bien, hay que destacar que los impuestos a abonar al comprar casa dependen directamente de su tipología: no pagarás lo mismo en tributos si compras una vivienda de segunda mano o una de nueva construcción.

Es probable que hayas oído hablar del ITP. El ITP o Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales es el tributo que se abona al adquirir una vivienda de segunda mano, y se trata de la tasa más importante -y cara- en las compraventas de viviendas usadas.

El tipo aplicable del ITP varía según la comunidad autónoma que se trate, en la que se halle el inmueble y se aplica sobre el valor de compra de la vivienda.

En cambio, el IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) es el que se abona en la compraventa de una vivienda nueva. Como ya sabrás, este tributo es el que se suele abonar al tramitar la compra de cualquier producto o servicio, y es, también, el que se paga al adquirir un inmueble de nueva construcción directamente al promotor o constructor.

En este caso, el valor del IVA en una compraventa de vivienda no varía en función de la autonomía, si no que se aplica un tipo impositivo general del 10%. Por lo tanto, al adquirir una vivienda nueva por un valor de 200.000 euros, abonarías 20.000 euros de IVA en cualquier comunidad autónoma.

Cabe destacar que, en ambos casos, tanto al comprar una vivienda de segunda mano como al adquirir una propiedad de nueva construcción, el tipo impositivo puede ser reducido en determinados casos:

• Al comprar viviendas de protección oficial (VPO) de nueva promoción se abona un IVA reducido del 4%.
• Las familias numerosas, monoparentales o colectivos específicos como los jóvenes o personas en situación de discapacidad pagan un ITP reducido.

Ahora bien, al comprar una vivienda de nueva construcción, debes abonar un segundo impuesto: el AJD. Conocidos como Actos Jurídicos Documentados, también se abonan en la compraventa de segunda mano, en concreto en la cuota fija que afecta al uso de papel timbrado de la escritura notarial.

En el caso de las compraventas de viviendas de segunda mano con hipoteca, el impuesto de AJD lo paga el banco desde el 18 de noviembre de 2018 (Real Decreto-ley 17/2018).

Calcular los gastos de compra de una vivienda depende de varios factores (notaría, gestoría, inscripción en el Registro de la Propiedad, impuestos, ubicación, etc.)  Veamos, a partir de un ejemplo, cómo hacer el cálculo total.

Si estás pensando en adquirir una vivienda en propiedad y te sientes perdido entre tanto papeleo, tributos y gastos, contacta con tu agente iad más cercano y recibe asesoramiento personalizado: el valor del ITP en tu comunidad autónoma, las bonificaciones a colectivos especiales, la documentación específica en tu localidad…

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